Los perrillos - Ofelia Gómez



Ofelia Gómez


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Entre los lejanos recuerdos de mi infancia aparece con frecuencia una mañana en que junto con mis primos salimos a correr por el campo. Mamá nos había advertido “Cuidado con las avispas” y “No vuelvan llenos de barro”. Pocos minutos después ya no recordábamos aquello de avispas y barro, así que saltábamos charcos, tirábamos cascotes a los pájaros y arrasábamos con cuanto rosado huevo de caracol apareciera en nuestro camino.

Éramos felices de estar juntos, como todos los veranos. Reíamos sin motivo y hacíamos planes para juntar piedritas y prepararnos para una batalla con nuestras hondas, pero luego de andar dando vueltas un buen rato hubo algo que nos detuvo. El suave viento, que era en realidad una brisa, nos trajo un olor extraño, hasta que vimos que a unos pocos metros había un bulto entre los pastos. Nos quedamos quietos mirándonos sin hablar, dudamos un instante. Ninguno de nosotros demostraba ese cierto temor a lo extraño que parecía envolvernos, hasta que Mario, que era el mayor del grupo, salió corriendo para ver de qué se trataba, y los demás lo seguimos con cierto orgullo por nuestra valentía. Era nada menos que el cadáver reseco de un zorro, seguramente muerto hacía bastante tiempo.

Esa aventura nos enseñó tempranamente la fragilidad de la vida. Nuevamente seguimos nuestras correrías fingiendo alegría, pero poco a poco nos fuimos separando. Me quedé solo con mis pensamientos tristes y me eché bajo un árbol. El sol pegaba fuerte y estaba cansado.

Del lado de las casas podía ver que se acercaban las socarronas hijas del capataz. Oía sus risas y sus cuchicheos mientras avanzaban hacia mí. Les gustaba burlarse de mi escasa experiencia en las cosas del campo, decían que era más molesto que un bebé. Me puse de pie dispuesto a alejarme de ellas.

Corrían rodeadas por sus tres perritos caniche toy que solo servían para hacer ruido y me mordisqueaban los tobillos apenas me descuidaba. Tuve éxito en mi huida, y hoy, al recordar la escena, pienso que esos perrillos no habrían existido si no fuera por el capricho de aquellas niñas. Imagino que, con el paso de los años, se habrán convertido en señoras serias y sin mascotas molestas.

Mis primos y yo nos desparramamos por el mundo, aunque a veces nos reunimos a través de la pantalla del ordenador, y entonces fingimos una alegría extraña como aquella vez que descubrimos lo frágil que podía ser la vida.
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21 comentarios:

  1. Hola Ofelia! Un relato muy entrañable al reflejar las vivencias de la infancia en el que has incorporado perfectamente las tres palabras que se pedían. La narración es de lectura fácil y amena, con buenas descripciones. Únicamente echo en falta algún diálogo que rompa el ritmo pausado de la narrativa y que a su vez le aporte un grado mayor de credibilidad al recuerdo.
    Buen trabajo!

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    1. Hola Lectora70
      Tienes razon, tenía espacio para agregar algún diálogo, no se me ocurrió. Reconozco que tengo algunas dificultades para poner personajes a conversar, pero prometo intentar.
      Gracias por tus palabras. Que tengas Felices Fiestas y un Buen Año.
      Abrazo!

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  2. Ofelia, bucólicos recuerdos nos traes. Dicen de quienes olvidan su pasado, que están condenados a repetirlo. Aunque los fifís, no te morderán más el tobillo. salu2, dulces navidades.

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    1. Muchísimas gracias Amilcar, hermosas palabras las tuyas.
      Buenas fiestas y buen año.
      Saludos!

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  3. Hola Ofelia, me ha gustado mucho. El párrafo del encuentro con el zorro muerto está muy bien.
    Yo creo que no soy muy bueno con las descripciones, los ambientes, y por eso empleo bastante los diálogos. Con ellos me encuentro más cómodo y admiro a quién puede escribir sin utilizarlos, y construir algo coherente y con fuerza.
    Saludos, felices fiestas.

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  4. Hola Ratopin, por el contrario yo necesito decidirme a escribir diálogos, pero me resulta complicado. Tú lo haces tan real que te he tomado de ejemplo.
    Buenas fiestas y buen año.
    Saludos.

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  5. Hola Ofelia, soy Vespasiano:
    Durante varios días he tenido problemas con la conexión a Internet, por eso no he podido, hasta ahora, leer tu relato que debo comentar, si o si, dada la proximidad de la publicación de nuestras historias.
    Bonita remembranza de la niñez que a la mayoría de los mortales se nos quedan impresas en la memoria y que ayudan a recordar a aquellos que fundamentalmente han alegrado nuestra vida ayudándonos a ser felices.
    Feliz Navidad.

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    1. Gracias Vespasiano, la historia no es verdadera, pero sí, porque los recuerdos del campo parecen formar un entramado con cierta realidad soñada.
      Ten Felices Fiestas!

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  6. Hola Ofelia:
    Te comenta primero alguna cosa de forma que yo cambiaría. Luego tú decides.
    Veo abundantes conjunciones QUE, especialmente en el segundo párrafo donde están muy juntas. Por ejemplo este párrafo: “hasta que vimos que a unos pocos metros había un bulto entre los pastos.” se podría quedar en: “hasta que vimos a unos pocos metros un bulto entre los pastos”. Por ejemplo.
    Esta frase: “una mañana en que junto con mis primos salimos…” yo la pondría así: “una mañana en la que, junto con mis primos, salimos…”
    “Mamá nos había advertido “Cuidado con las avispas” y “No vuelvan llenos de barro”. Cuidado y No deben ir en minúscula ya que no precede a punto.
    “…batalla con nuestras hondas, pero luego de andar dando vueltas un buen rato hubo algo que nos detuvo.” Pondría punto después de hondas en lugar de la coma y pondría coma después de rato.
    El párrafo que empieza con “Corrían rodeadas” lo uniría al anterior ya que está contando la misma escena.
    El relato cuenta un recuerdo entrañable de infancia. No hace falta contar un dramón o una tragedia para escribir. Así que está bien. Lo único que parece que cuentas dos anécdotas: la del perro que termina con la enseñanza acerca de la fragilidad de la vida, pero continúa el relato contando lo de los caniches que se queda un poco como otra historia aunque sea el mismo día. La moraleja del relato ya estaba dicha.
    Un saludo.

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    1. Muchas gracias Isan por tu pormenorizado comentario. Tendré en cuenta tus palabras.
      En realidad la historia relata una mañana de travesuras de niños, pequeñas aventuras que quedan en el recuerdo a pesar del tiempo.
      Felices Fiestas y Buen Año!

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  7. Hola Ofelia ,tercer intento de comentar tu relato así que resumo: Me ha gustado el relato el comienzo me ha resultado un poco Larco asta llegar al primer punto. Y echo de menos algo de dialogo entre personaje sobre todo entre sus primos ya que los vuelves a meter en el relato,felices fiestas y prospero año, de ortografía y gramática ya sabes que soy un maestro liendre. José maría.

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    1. Hola José María, tienes razón, deberé animarme a los diálogos. Muchas gracias por leer mi texto.
      Ten buenas fiestas. Falta nada para 2020, allí nos seguiremos leyendo, ahora pasaré por tu "Amor de azúcar".

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  8. Hola Ofelia, ah los recuerdos de niñez. Te animo a los diálogos. Comienza con pocos puede ser una emoción de un personaje a otro que los describa como son y poco a poco en otros relatos te vas animando. Ni te imaginas cuanto se puede contar con ellos. Yo empecé así y algunos de mis relatos son casi todo un diálogo. Son inspiradores. Un abrazo y un feliz año nuevo.

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    1. Gracias Emerencia, practicaré tu sugerencia, quién te dice que aprenda y lo logre :).
      Felices Fiestas y Buen Año. Pasaré por "Pensamiento de caracol".
      Abrazos.

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  9. Discúlpame Ofelia pero prefiero comentarte con la atención que merece tu relato, que ya veo consta de poco más de 400 palabras, aunque se nos indicase que el formato fuera de 750 palabras, pero como soy nueva quizás solo sea una simple sugerencia. Tampoco he observado ninguna falta ortográfica. Así, a voz de pronto he observado algunas repeticiones de palabras en el segundo párrafo.
    De todas formas pasaré por aquí en cuanto me sea posible para analizar tu texto como es debido.

    ¡Felices Fiestas y Próspero Año Nuevo!
    Saludos.

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  10. Hola de nuevo Ofelia, un placer saludarte. Bueno, aparte de lo que ya te mencioné con anterioridad, ahora añado estas otras observaciones:

    1.- En el primer párrafo, deberían ponerse dos puntos después de "Mamá nos había advertido..." y antes de las frases entrecomilladas, puesto que el narrador protagonista pasa a replicar lo que ha dicho otro protagonista.
    Con lo que debería quedar así: Mamá nos había advertido: “Cuidado con las avispas y no vuelvan llenos de barro”.

    2.- Coincido con otra compañera que te ha advertido antes que yo, en la reiteración de la conjunción "que" en el segundo párrafo, ya que están muy seguidas en algunos casos. También deberías sustituir otras repeticiones de este mismo párrafo: "para" (tres veces), "extraño" (dos), "hasta" (dos) y "cierto" (dos). Aunque como tú eres la autora puedes hacer lo que prefieras, pero ten presente, que en un mismo párrafo, es mucho mejor evitar este tipo de reiteraciones.

    Por lo demás me ha parecido una historia muy bucólica llena de remembranzas de la niñez, entrañable, con buenas descripciones y bien desarrollada con su nudo y desenlace. También te animo a incluir diálogos para darle más fuerza a la historia.

    Saludos.

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    1. Hola Estrella, fíjate que te respondo más abajo, olvidé clickear en "responder"!!

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  11. Hola Estrella. Muchas gracias por leer mi relato y comentarlo.
    Sí, mi texto es solo de cuatrocientas palabras, puedes escribir algo más extenso o no, pero el límite de setecientas cincuenta es obligatorio, de lo contrario el sistema rechazaría el relato.
    Buena sugerencia la de los dos puntos, debería quedar así: Mamá nos había advertido: “Cuidado con las avispas" y "no vuelvan llenos de barro” porque son dos recomendaciones que la madre da en diversos momentos.
    Tal como tú dices, aparecen demasiadas repeticiones en el segundo párrafo, revisaré mi archivo y trataré de mejorar "Los perrillos".
    Nos seguiremos leyendo por aquí.
    Ten un Feliz Fin de Año y nuevos retos y logros para 2020!

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    1. Encantada de disfrutar de tu relato y de ayudarte a enriquecer tu texto.
      Te deso también un ¡Feliz Año nuevo 2020 con nuevas metas y éxitos!
      Nos seguiremos leyendo por aquí.
      Saludos.

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  12. Hola Ofelia, aquí te devuelvo gustoso tu amable visita.

    Me resultan atractivos los relatos en los que se rememoran experiencias pasadas y si son de la infancia con más razón aún. Me ha gustado cómo has organizado la trama, de forma sencilla, acorde con la historia contada.

    Comparto con algunos compañeros, que quizás un poco de diálogo hubiera mejorado el relato.

    Me ha gustado tu trabajo.

    Nos leemos. Saludos y feliz año.

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    1. Hola Apuntador Mudo, muchas gracias por tu comentario. Si bien la historia no es real, tiene mucho de experiencias de la niñez.
      Tendré en cuenta tus palabras.
      Espero que hayas pasado muy buenas fiestas.
      Saludos.

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